“En Dios he confiado; no temeré”
(Salmos 56:11)
▲ Nuestra vida es mucho más tranquila
y victoriosa cuando entregamos en las
manos del Señor nuestras grandes decisiones |
Cuando enfrentas luchas difíciles y cuando tus fuerzas parecen insuficientes para vencerlas, la decisión más sabia es buscar la dirección de Dios. Él jamás perdió una lucha, y seguro en Sus manos, tú tampoco perderás ninguna. La derrota no forma parte del vocabulario de los hijos de Dios. Somos siempre vencedores y los mismos tropezones y caídas del camino cooperan para nuestro bien y edificación espiritual. Siguiendo la dirección del Señor, llegarás a las victorias anheladas y, por fin, a la morada eterna junto a tu Padre celestial.
¿Tienes temor o desconfianza de seguir adelante? ¿Te preocupas por las decisiones que debes tomar? Entonces coloca tu vida delante de Cristo y entrégasela para que El la gobierne. El es nuestro pastor, nuestro guía, el amigo en quien podemos confiar siempre. Tiene placer en ayudarnos y auxiliarnos cuando las batallas se vuelven más duras. Él nos abraza y nos dirige, y a Su lado, en todas las situaciones, estaremos plenamente seguros.
Oración:
Señor Jesús, en este día te entrego mi vida con la confianza en que todo, pero absolutamente todo, ayudará para mi bien. Amén.
¡Te bendigo! Pastor Antonio Trejo