“Y toda la congregación que volvió de la cautividad hizo tabernáculos, y en tabernáculos habitó; porque desde los días de Josué hijo de Nun hasta aquel día, no habían hecho así los hijos de Israel. Hubo alegría muy grande, y leyó Esdras el libro de la ley de Dios cada día”
(Nehemías
8:17)
La lectura de la Biblia en nuestros días no sólo
es una necesidad espiritual; también trae mucha felicidad con ella |
El
versículo en el que meditamos hoy se refiere a una de las fiestas de Israel, en
la que se recordaba cómo Dios había sacado de Egipto a su pueblo con mano
poderosa.
La
Biblia nos relata que Esdras leía el libro de la ley (o sea la palabra de Dios)
“todos los días”. El relato prosigue indicando que esto produjo mucha alegría
en el pueblo, en este reencuentro con la palabra de Aquel que los había
liberado y protegido en las más grandes adversidades. De ello se deduce
que leer la Biblia en nuestros días siempre nos producirá felicidad.
Cuánta gente que hoy
está leyendo este devocional se siente privada de felicidad y alegría,
pero hoy te aliento a que leas la Biblia y vas a ver que esto producirá una
renovación del gozo en tu vida. Esdras leyó todos los días el
libro de la ley, y el pueblo se juntaba a escuchar, y eso produjo mucha
felicidad. Te aseguro que lo mismo te va a ocurrir a ti: cuando leas las
Escrituras vas a tener mucho gozo.
Oración:
Señor, en este día me propongo
leer las Escrituras y meditar en ellas, porque sé que tu Palabra producirá
alegría en todo mi ser.
¡Te
bendigo! Pastor Antonio Trejo.